¿Por qué los Adventistas del Séptimo Día guardan el sábado?


🙏 Introducción

La observancia del sábado es una doctrina central dentro del mensaje de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Lejos de tratarse de una costumbre cultural o de una norma antigua, su práctica se basa en principios eternos establecidos por Dios desde la creación. Este artículo explora las razones bíblicas y teológicas por las cuales los adventistas honran el séptimo día como día de reposo.


🌿 El origen del sábado en la creación

🕊️ Establecido antes del pecado

El sábado se origina en el relato de la creación, antes de la entrada del pecado en el mundo. La Biblia declara:

“Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo... y bendijo Dios al día séptimo y lo santificó.”
(Génesis 2:2-3)

Este acto sagrado, realizado por Dios mismo, establece al sábado como un día distinto, apartado para el descanso y la adoración.

📌 Un recordatorio semanal del Creador

La institución del sábado tiene como propósito mantener viva en la mente humana la identidad de Dios como Creador de todas las cosas. Cada semana, al observar el sábado, los creyentes recuerdan su dependencia de Dios y su llamado a vivir bajo su autoridad.


📜 El sábado en los Diez Mandamientos

📖 El cuarto mandamiento

La observancia del sábado fue reafirmada en el monte Sinaí como parte del Decálogo:

“Acuérdate del día de reposo para santificarlo... porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra... y reposó en el séptimo día.”
(Éxodo 20:8-11)

El mandamiento no solo ordena guardar el sábado, sino que lo relaciona directamente con la creación, fortaleciendo su carácter universal.

⚖️ Un principio moral y eterno

A diferencia de leyes ceremoniales que fueron abolidas con la cruz (Colosenses 2:14), los Diez Mandamientos expresan principios morales permanentes. El hecho de que el sábado esté incluido en esta ley lo vincula con el carácter de Dios, que es inmutable (Malaquías 3:6).


✝️ El ejemplo de Jesús y los apóstoles

👣 Jesús y el sábado

Durante Su ministerio, Jesús guardó el sábado:

“Y vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre...”
(Lucas 4:16)

Jesús no solo observó el sábado, sino que lo defendió del legalismo, enseñando que fue hecho para beneficio del ser humano (Marcos 2:27-28).

📚 La práctica apostólica

Después de la resurrección, los apóstoles continuaron observando el sábado. Hechos 17:2-3 relata cómo Pablo asistía regularmente a la sinagoga en sábado para enseñar. También en Hechos 13:42-44 se menciona que tanto judíos como gentiles escuchaban la Palabra de Dios en ese día.


🔍 El sábado como señal del pueblo de Dios

🪧 Identidad del pacto

Dios dice en Ezequiel 20:12:

“Y les di también mis sábados, para que fuesen por señal entre mí y ellos, para que supiesen que yo soy Jehová que los santifico.”

Esta señal distingue a quienes reconocen a Dios como su santificador. Es un símbolo visible de fidelidad y consagración.

⏳ Relevancia escatológica

El libro de Apocalipsis presenta una crisis final entre los mandamientos de Dios y los mandamientos de los hombres. En Apocalipsis 14:12 se dice:

“Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.”

Los adventistas interpretan que el sábado será un punto clave en esa prueba final de fidelidad.


📗 La perspectiva del Espíritu de Profecía

La importancia del sábado también es abordada por Elena G. de White en el libro El Conflicto de los Siglos, donde se trata su papel en la fidelidad del pueblo de Dios en el tiempo del fin. Se recomienda la lectura personal de esta obra para ampliar el entendimiento de este tema desde una perspectiva profética.


🌍 El sábado en la nueva tierra

En Isaías 66:22-23 se encuentra una promesa profética sobre la eternidad:

“Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra que yo hago permanecerán delante de mí... de mes en mes, y de sábado en sábado, vendrán todos a adorar delante de mí.”

Esto indica que la adoración en sábado no es temporal ni limitada al Antiguo Testamento, sino que se extenderá incluso en la vida futura.


🧭 Conclusión

El sábado es una institución divina que trasciende culturas, épocas y sistemas religiosos. Fue santificado en la creación, codificado en la ley moral de Dios, practicado por Jesús y los apóstoles, y se mantendrá vigente en la eternidad. Para los Adventistas del Séptimo Día, su observancia es una forma de rendir homenaje al Creador, de recibir descanso espiritual y de manifestar su lealtad a Dios en un mundo que lo ha olvidado.


📘 Recursos adicionales


Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente